Valgan dos máximas:
1. Los economistas pasan 6 meses del año formulando una teoría y los siguientes seis meses, explicando por qué dicha teoría no funcionó.
2. La tasa aceptable de desempleo es aquella que no afecta al economista que la formula (Alirio Seekatz).
Ergo, cualquier parecido con la realidad es puro azar.
La crisis de 1929 fué una crisis de crédito, la de 2008 tambien; la gran diferencia es la globalidad de la crisis actual y la intervención de los aparatos financieros de los Estados, sin lo cual, el derrumbe de la economía mundial sería una catástrofe que haría palidecer a la del '29.
El caso es que el ajuste económico es inevitable e impredecible en sus consecuencias, pero necesario para restablecer el equilibrio.
Las naciones, de una forma u otra, tendrán que proteger sus economías internas, los países mas poderosos se recuperarán a expensas de los mas débiles.
El ser humano común, que trabaja , tiene su vivienda, sus hijos y trata de mejorar su calidad de vida y la de los suyos, debe ser previsor porque vienen tiempos duros: optimice la utilización de los recursos, sea más productivo (aunque ello parezca que solo aumenta las ganancias de la empresa en que trabaja), busque nuevas fuentes de ingreso, cuide y dé mantenimiento a sus bienes, reduzca el gasto de energía(electricidad, combustibles), produzca alimentos aunque sea en su piso, no incurra en gastos innecesarios y, ante todo, reclame a sus representantes políticos que sean austeros y productivos, igual que usted. Tomen en cuenta que la crisis del '29 duró, en unos países mas y en otros menos, cerca de 4 años.
Es primordial que pasemos la prueba, al final de este ajuste, como en el libro de Darwin, sobrevivirán los mas aptos.
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